- Votes:
- See also:
Hroes Del Silencio - Bendecida lyrics
si la primera mirada es la que vale
-esto ya lo ensean las madres-
recupar la cordura
hacia una fosa comn
cosidos a preguntas.
agrio es el sabor
de la noche en abandono
ser el da en que inicie
el retorno.
me estorba la memoria,
los sentidos me distraen
y se equivocan
en las aguas de la certeza
nos hicimos la promesa
de las aguas de pokara,
"y el perfume que emane del sexo
se fundir en nuevo grito".
nunca he confiado
en los labios muy finos,
de ellos huyo como un fugitivo,
y amansas el oleaje
que rompe contra mis venas,
purificas el aire.
en las aguas de la certeza
nos hicimos la promesa
de las aguas de pokara,
"y el perfume que emane del sexo
se fundir en nuevo grito".
de las brasas de una constelacin
al mundo perecedero,
bendecida fue la causa
de mi fortuna.
y de la tierra perdida en la infancia
al mundo perecedero,
bendecida fue la casa de mi fortuna.
algo que no me han consentido
y que ahora busco entre tus huesos,
algo que desde tan lejos
cre que no era,
cre que no era mi estilo.
cuando abandones tu sueo sabrs
que has muerto
y los gusanos siempre estn hambrientos.Hroes Del Silencio - Bendecida - http://motolyrics.com/hroes-del-silencio/bendecida-lyrics.html
oriente no cree en el sarcasmo
que antao nos gobern,
soy el len domado.
en las aguas de la certeza
nos hicimos la promesa
de las aguas de pokara,
"y el perfume que emane del sexo
se fundir en nuevo grito".
de las brasas de una constelacin
al mundo perecedero,
bendecida fue la causa
de mi fortuna.
y de la tierra perdida en la infancia
al mundo perecedero,
bendecida fue la casa de mi fortuna.
algo que no me han consentido
y que ahora busco entre tus huesos,
algo que desde tan lejos
cre que no era,
cre que no era mi estilo.
cuando abandones tu sueo sabrs
que has muerto
y los gusanos siempre estn hambrientos.
oriente no cree en el sarcasmo
que antao nos gobern,
soy el len domado.
en las aguas de la certeza
nos hicimos la promesa
de las aguas de pokara,
"y el perfume que emane del sexo
se fundir en nuevo grito".
de las brasas de una constelacin
al mundo perecedero,
bendecida fue la causa
de mi fortuna.
y de la tierra perdida en la infancia
al mundo perecedero,
bendecida fue la casa de mi fortuna.
algo que no me han consentido
y que ahora busco entre tus huesos,
algo que desde tan lejos
cre que no era,
cre que no era mi estilo.